martes, 17 de septiembre de 2013

POR EL ACCESO IGUALITARIO DE DERECHOS Y CONTRA TODA DISCRIMINACIÓN E INTOLERANCIA

 
 
 
PRONUNCIAMIENTO

 
En Tierra y Libertad luchamos por una sociedad y un mundo sin exclusiones de ningún tipo, que garanticen la inclusión de todos los ciudadanos y ciudadanas, en pie de igualdad, en el ejercicio de sus derechos políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales. Y como afirma nuestro ideario fundacional combatimos con vehemencia todas las discriminaciones que aquejan a la humanidad, sea por distinción de clase, color de piel, diferencia de género, discapacidad, credo religioso o diferencias culturales o de orientación sexual.

Por lo tanto, creemos que la propuesta de Ley presentada por el Congresista Bruce planteando la “Unión Civil” es un avance, aunque limitado e insuficiente, para reconocer y equiparar los derechos entre heterosexuales y la población LGTBI.

En Tierra y Libertad creemos que en un Estado Laico deben existir los mismos derechos para todos y todas y que no deben existir instituciones religiosas o militares que se reclamen tutelares sobre un poder que es soberano. Así, afirmamos también que no debe discriminarse ni negarles iguales derechos a las personas del mismo sexo que han decidido unirse que aquellos que les reconoce a un hombre y una mujer cuando deciden hacerlo. Es decir, ser iguales todos y todas ante la ley.

Proclamamos que es necesario el debate en torno al matrimonio, como institución patriarcal y base de la sociedad capitalista, centrada en la propiedad y la herencia, lo cual es sin duda debatible y cuestionable desde nuestras posiciones ecolibertarias. Por ello, definir la permanencia del matrimonio como eje estructurador de la sociedad es un debate abierto en el que creemos que todos y todas los ciudadanos democráticos debemos participar con tolerancia y respeto a la diversidad de opiniones sin descalificarlas porque sean diferentes o no nos gusten.

Avanzar en la construcción de una sociedad social y ecológicamente más justa e igualitaria es un esfuerzo que, aunque las fuerzas de poder ultraconservador quieren cerrar el paso, es una tarea que cada vez debe convocarnos a más ciudadanos y ciudadanas de nuestro país el que debe caminar hacia la superación de una cultura machista, sexista y patriarcal. Todo esto supone un debate franco y honesto, sin sectarismos e intolerancias, en Tierra y Libertad partimos del principio de la unidad de todas las luchas y somos conscientes de que romper con los tabúes de la sociedad peruana supone un compromiso permanente desde quienes trabajamos desde la izquierda para construir cambios políticos y culturales profundos para convencer a más y constituir un poder contrahegemónico que desnude y derrote todo otro poder capaz de oprimir, discriminar, incluso imponerse violentamente como está ocurriendo contra los pueblos que se resisten a la imposición de la política extractivista neoliberal o son asesinados o asesinadas por su orientación sexual y opción de vida diferentes. Aspiramos que, aun con pequeñas victorias, seremos cada vez más los que en nuestro país nos sumemos a esta justa lucha.

Sabemos que esta tarea tampoco será fácil, deberemos romper con muchos prejuicios, cambiar de paradigmas, y que la manera de hacerlo es haciendo pedagogía política en la calle, en la organización social, en las bases y no solo en discursos o actividades de incidencia como si el poder nos hubiera sido enajenado.

En Tierra y Libertad estamos construyendo nueva y verdadera institucionalidad política democrática y por ello, desde nuestro coordinador nacional hasta el militante de base estamos debatiendo todos estos procesos, construyendo todos estos compromisos, por lo cual rechazamos todo tipo de intolerancias vengan estas de iglesias conservadoras, medios de comunicación, grupos de poder u organizaciones políticas sean estas de derecha, centro o izquierda, reafirmándonos en nuestros principios fundacionales y sus nuevas formulaciones nacidas de procesos de construcción colectivos y democráticos en los que, si los hubiera, iremos corrigiendo errores y precisando mejor nuestras metas de un Perú diferente, más radicalmente democrático y más justo.

En este camino, en que sabemos no somos dueños de verdades ni agendas absolutas nos encontraremos en la movilización ciudadana popular, construyendo consensos sólidos para la igualdad y no meras declaraciones calculadas para tiempos electorales.

Lima, 16 de setiembre 2013.

Marco Arana Zegarra, Coordinador Nacional.
Marisa Glave y Wilbert Rozas, Coordinadores Nacionales adjuntos.
Comisión Política Nacional de Tierra y Libertad

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